Educación Superior y Pueblos Indígenas
Fundamentos del Sistema de Evaluación y Acreditación Propia de Instituciones Indígenas Interculturales, Comunitarias de Educación Superior de Abya Yala.
RED DE UNIVERSIDADES INDIGENAS, INTERCULTURALES, COMUNITARIAS DE ABYA YALA, RUIICAY
“REVITALIZANDO LOS CONOCIMIENTOS, SABERES Y PRÁCTICAS PARA EL BUEN VIVIR DE LOS PUEBLOS DE ABYA YALA”
Abya Yala Enero 2012
El análisis de la calidad de la gestión en las entidades educativas del subsistema de educación superior, particularmente en aquellas regiones multiculturales de América Latina, debe considerar las matrices culturales de los Pueblos que acceden a las aulas de clase, inclusive, debe verse el tipo de universidad y su modelo educativo. Este análisis de la calidad de las instituciones de educación superior debe contemplar el desarrollo de un modelo de universidad que promueva un paradigma educativo basado en la realidad socio-histórica y étnico- cultural, donde se trata de combinar conocimientos y saberes locales con el conocimiento “occidental” no tradicional.
Ya desde la segunda mitad del Siglo XX se desarrolló y consolidó un nuevo tipo de sociedad: la llamada sociedad del conocimiento y la información y que ésta conlleva una economía que valoriza los conocimientos teóricos y aplicados haciendo imprescindible repensar el rol de las instituciones especializadas en la administración del conocimiento desde la sociedad y el estado”1. Esta sociedad del conocimiento que responde a los avances en la ciencia y la industria, requieren de un sinnúmero de especialistas en diversas áreas del conocimiento para mejorar la producción del conocimiento en aras de fortalecer los mercados y el desarrollo de los pueblos.
Sin embargo, los modelos “tradicionales” de universidad vienen formando a profesionales y técnicos desarraigados de su matriz cultural, produciendo con esto, la administración del conocimiento de cara a facilitar los procesos de industrialización en menoscabo del medio ambiente y la biodiversidad necesaria para el buen vivir de los pueblos.
“Por ello, debemos prestar atención también a la calidad de la experiencia educativa que se impulsa en las aulas de clase de cada casa de estudios, tratando siempre de asegurar que se den las posibilidades de interacción entre las matrices culturales diferentes que lleven a generar nuevos conocimientos, saberes y prácticas al servicio de los pueblos.
Desde que la universidad es universidad, su propósito fundamental, su misión ha sido la de promover la autonomía de la conciencia, una conciencia critica; ha tenido el propósito de desarrollar la habilidad de problematizar, defender la primacía de la verdad sobre la utilidad. Esto es lo que debemos buscar cuando hablamos de la calidad de los procesos educativos. En las últimas décadas, los objetivos de las universidades se han ido transformando radicalmente, buscando más una enseñanza que de repuestas a las demandas económicas, técnicas y administrativas del momento. Esto se expresa en los siguientes comentarios:
“Una de las características que mejor define a la universidad de hoy, es su acelerada incorporación a la lógica empresarial y comercial que hoy domina todas las esferas del quehacer humano”2. Por otro lado, se “ha instalado con fuerza avasalladora la concepción que, para justificar su existencia, resulta imprescindible que la universidad exhiba resultados mensurables y comercializables. De allí que se apliquen a la institución y a sus “productos”, los mismos criterios con los que se juzga la productividad y la eficiencia de las empresas que comercializan bienes, en este caso la educación”.
(...) “La lógica empresarial ha conquistado de manera acelerada un territorio que, hasta no hace mucho, estaba ligado a valores culturales y académicos y no a los puramente materiales y comerciales. Parecería que no se advierte que resulta imposible aplicar la lógica de las empresas a un “producto” tan difícil de definir como “un estudiante educado” o un “conocimiento significativo”.
“En líneas generales, predomina una actitud que impulsa a las universidades a “rediseñar sus productos, presentarlos y venderlos” de acuerdo con las prioridades cambiantes de los consumidores. Se está subvirtiendo la convicción de que “las universidades existen para crear y mantener con vida ideas que pueden no estar de moda y que tal vez nunca lleguen a ser populares, logrando mediante la educación, que otras personas comprendan cómo y por qué se trata de visiones importantes”.
Hemos estado observando en las últimas décadas, cómo a la institución universitaria se le ha quitado su rol social: la voluntad de transformar la realidad. Los esfuerzos hoy deben estar dirigidos a que la universidad este lista para enfrentar la nueva lucha histórica contra todo intento de colonización de la razón, el saber y el ser, los cuales por lo general vienen disfrazados con “modelos de desarrollo” como por ejemplo la globalización y la tecnociencia”.
Lo anterior ha llevado a que se reduzca la formación general y humanista y priorizando la tecnocracia por encima de principios y valores de convivencia humana y construcción de ciudadanías interculturales.
Para poder hacer el análisis de la calidad de las Instituciones de educación superior, es preciso crear un sistema de evaluación y acreditación que considere de manera sinequanom, las distintas cosmovisiones, las formas distintas de matrices culturales, las distintas formas de construir, de crear conocimientos y de compartirlos para el cambio social.
Un sistema de evaluación dónde se construya criterios, estándares, parámetros, indicadores culturalmente pertinentes a los modelos educativos y a la filosofía institucional.
Las Instituciones Indígenas Interculturales Comunitarias de Educación Superior, tienen su sustento en dos grandes marcos: un fundamento jurídico y un fundamento epistemológico, los cuales posibilitan el desarrollo de un sistema diferenciado de evaluación y acreditación de la calidad de sus procesos.
El fundamento jurídico de las universidades indígenas interculturales y comunitarias, tiene su sustento en los mandatos y reconocimiento de los pueblos que hacen las constituciones políticas de los países de América Latina. Casos como el de Bolivia, Ecuador, se reconocen como Estados y Gobiernos Plurinacionales. Por otro lado, Nicaragua se reconoce como un Estado Plurilingüe y Multicultural desde su constitución política. Así mismo, los otros países del área, establecen en sus cartas magnas el reconocimiento de la diversidad cultural de su Estado y Gobierno; inclusive, han llegado a crear leyes y políticas públicas que hablan de atender la diversidad de los pueblos, siendo la más común, políticas en educación intercultural bilingüe.
Por otro lado, hay instrumentos jurídicos internacionales que cobijan el derecho de los pueblos a desarrollar sus procesos culturales educativos de acuerdo a sus propios modelos. Por un lado, la Declaración Universal de Derechos Humanos en su artículo 26 refiere que:
“Toda persona tiene derecho a la educación. La educación debe ser gratuita, al menos en lo concerniente a la instrucción elemental y fundamental. La instrucción elemental será obligatoria. La instrucción técnica y profesional habrá de ser generalizada; el acceso a los estudios superiores será igual para todos, en función de los méritos respectivos.
“La educación tendrá por objeto el pleno desarrollo de la personalidad humana y el fortalecimiento del respeto a los derechos humanos y a las libertades fundamentales; favorecerá la comprensión, la tolerancia y la amistad entre todas las naciones y todos los grupos étnicos o religiosos, y promoverá el desarrollo de las actividades de las Naciones Unidas para el mantenimiento de la paz”.
Similar aspecto se señalan en los artículos 13 y 15 del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, donde se establece que:
“Toda persona debe tener la posibilidad de expresarse, crear, difundir sus obras en la lengua que desee y en particular en su lengua materna; toda persona tienen derecho a una educación y una formación de calidad que respeten plenamente su identidad cultural, todo persona debe tener la posibilidad de participar en la vida cultural que elija y conformarse a las prácticas de su propia cultura, dentro de los límites que impone el respeto de los derechos humanos y de las libertades fundamentales”.
Así mismo, desde el año 2001, la UNESCO aprobó la Declaración sobre la Diversidad Cultural, que pone de manifiesto: (a) la riqueza que, para el mundo, significa la existencia de una diversidad de culturas, y (b) la importancia de entrelazar cultura, diversidad y derechos individuales, cerrando el paso al relativismo cultural, posición teórica que cuestiona los derechos humanos. En el año 2005, aprobó también la Convención sobre la Diversidad Cultural, un documento con valor jurídico que apuesta por un requilibrio en la producción y la difusión de bienes y servicios, buscando siempre como relevar la importancia de la educación como motor del desarrollo de los pueblos.
En otro ámbito, el Programa de la Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) titulaba el informe para el desarrollo humano del año 2004 “La Libertad Cultural en el Mundo Diverso de Hoy”, y afirmaba que toda política de desarrollo, en países ricos o países pobres, tenía que incorporar una dimensión cultural, basada en los derechos y las libertades fundamentales, con el objetivo de dar, a cada ciudadano del mundo, más herramientas para desarrollar el proyecto de libertad personal.
El Convenio 169 de la OIT, por su lado señala en el artículo 2 que:
"Los gobiernos deberán asumir la responsabilidad de desarrollar, con la participación de los pueblos interesados, una acción coordinada y sistemática con miras a proteger los derechos de esos pueblos y a garantizar el respeto de su integridad”.
Esta acción deberá incluir medidas: a) que aseguren a los miembros de dichos pueblos gozar, en pie de igualdad, de los derechos y oportunidades que la legislación nacional otorga a los demás miembros de la población; b) que promuevan la plena efectividad de los derechos sociales, económicos y culturales de esos pueblos, respetando su identidad social y cultural, sus costumbres y tradiciones, y sus instituciones; c) que ayuden a los miembros de los pueblos interesados a eliminar las diferencias socioeconómicas que puedan existir entre los miembros indígenas y los demás miembros de la comunidad nacional, de una manera compatible con sus aspiraciones y formas de vida.
Por otro lado, el Artículo 3 del mismo convenio refiere que:
“1. Los pueblos indígenas y tribales deberán gozar plenamente de los derechos humanos y libertades fundamentales, sin obstáculos ni discriminación, Las disposiciones de este Convenio se aplicarán sin discriminación a los hombres y mujeres de esos pueblos”.
En su artículo 5 refiere que al aplicar las disposiciones del presente Convenio:
“a) deberán reconocerse y protegerse los valores y prácticas sociales, culturales, religiosos y espirituales propios de dichos pueblos y deberá tomarse debidamente en consideración la índole de los problemas que se les plantean tanto colectiva como individualmente;
d) deberá respetarse la integridad de los valores, prácticos e instituciones de esos pueblos;
c) deberán adoptarse, con la participación y cooperación de los pueblos interesados, medidas encaminadas a allanar las dificultades que experimenten dichos pueblos al afrontar nuevas condiciones de vida y de trabajo.
Por otro lado, el Convenio 169 de la OIT, en su artículo 27, numerales 1,2 y 3 reflejan lo siguiente:
1. “Los programas y los servicios de educación destinados a los pueblos interesados deberán desarrollarse y aplicarse en cooperación con éstos a fin de responder a sus necesidades particulares, y deberán abarcar su historia, sus conocimientos y técnicas, sus sistemas de valores y todas sus demás aspiraciones sociales, económicas y culturales”.
2. “a autoridad competente deberá asegurar la formación de miembros de estos pueblos y su participación en la formulación y ejecución de programas de educación, con miras a transferir progresivamente a dichos pueblos la responsabilidad de la realización de esos programas, cuando haya lugar”.
3. “Además, los gobiernos deberán reconocer el derecho de esos pueblos a crear sus propias instituciones y medios de educación, siempre que tales instituciones satisfagan las normas mínimas establecidas por la autoridad competente en consulta con esos pueblos. Deberán facilitárseles recursos apropiados con tal fin”.
“El Convenio 169 de la OIT, en el ámbito comparativo internacional inherente a los Pueblos indígenas, es el instrumento jurídico más completo y especifico, aunque no suficiente frente a la demanda indígena; convenio que garantiza el reconocimiento y vigencia de los derechos constitucionales de los pueblos indígenas; constituye la base legal por medio de la cual se exige el respeto de los derechos humanas específicos de las nacionalidades y pueblos indígenas. Principios como el del respeto y desarrollo de sus conocimientos colectivos, saberes ancestrales, la educación intercultural bilingüe, sus metodologías y enseñanzas son bases que impulsan y que marcan una nueva forma de relación entre Estados y pueblos indígenas4”.
En el mismos sentido del reconocimiento de los derechos de los pueblos, la Declaración de Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas, aprobada el 13 de septiembre del 2007, en el numeral 1 del artículo 14 dice: “Los pueblos indígenas tienen derecho a establecer y controlar sus sistemas e instituciones docentes que impartan educación en sus propios idiomas, en consonancia con sus métodos culturales de enseñanza y aprendizaje”. Esto da un reconocimiento particular a los derechos colectivos sobre la base de una educación concebida desde los propios pueblos.
Con la lógica del respeto de los derechos históricos colectivos; la Asamblea General, de las Naciones Unidas, proclamó el año 2011 como el Año Internacional de los Pueblos Afrodescendientes. Esta declaratoria refiere que:
“Proclama el año que comienza el 1° de enero de 2011 Año Internacional de los Afrodescendientes, con miras a fortalecer las medidas nacionales y la cooperación regional e internacional en beneficio de los afrodescendientes en relación con el goce pleno de sus derechos económicos, culturales, sociales, civiles y políticos, su participación e integración en todos los aspectos políticos, económicos, sociales y culturales de la sociedad, y la promoción de un mayor conocimiento y respeto de la diversidad de su herencia y su cultura”.
Por otro lado, las instancias especializadas en educación, fundamentalmente en el nivel superior, han venido trabajando también en establecer procesos de abordajes diferentes para la educación de los pueblos culturalmente diferentes y a sus modelos educativos.
Por un lado, la Conferencia Regional de Educación Superior (CRES) desarrollada en Cartagena de Indias, Colombia en el año 2008, refiriéndose a los derechos de los Pueblos por una educación intercultural, reflejó en su declaratoria final lo siguiente en su inciso C - Cobertura y modelos educativos e institucionales lo siguiente:
Para asegurar un significativo crecimiento de la cobertura educacional requerida para las próximas décadas, se hace imprescindible que la Educación Superior genere las estructuras institucionales y las propuestas académicas que garanticen el derecho a ella y la formación del mayor número posible de personas competentes, destinadas a mejorar sustancialmente el soporte sociocultural, técnico, científico y artístico que requieren los países de la región.
Dada la complejidad de las demandas de la sociedad hacia la Educación Superior, las instituciones deben crecer en diversidad, flexibilidad y articulación. Ello es particularmente importante para garantizar el acceso y permanencia en condiciones equitativas y con calidad para todos y todas, y resulta imprescindible para la integración a la Educación Superior de sectores sociales como los trabajadores, los pobres, quienes viven en lugares alejados de los principales centros urbanos, las poblaciones indígenas y afrodescendientes, personas con discapacidad, migrantes, refugiados, personas en régimen de privación de libertad, y otras poblaciones carenciadas o vulnerables.
Se deben promover la diversidad cultural y la interculturalidad en condiciones equitativas y mutuamente respetuosas. El reto no es sólo incluir a indígenas, afrodescendientes y otras personas culturalmente diferenciadas en las instituciones tal cual existen en la actualidad, sino transformar a éstas para que sean más pertinentes con la diversidad cultural. Es necesario incorporar el diálogo de saberes y el reconocimiento de la diversidad de valores y modos de aprendizaje como elementos centrales de las políticas, planes y programas del sector.
Dar satisfacción al aumento de las exigencias sociales por Educación Superior requiere profundizar las políticas de equidad para el ingreso e instrumentar nuevos mecanismos de apoyo público a los estudiantes (becas, residencias estudiantiles, servicios de salud y alimentación, tanto como el acompañamiento académico), destinados a permitir su permanencia y buen desempeño en los sistemas.
Producir transformaciones en los modelos educativos para conjurar los bajos niveles de desempeño, el rezago y el fracaso estudiantil, obliga a formar un mayor número de profesores capaces de utilizar el conjunto de las modalidades didácticas presenciales o virtuales, adecuadas a las heterogéneas necesidades de los estudiantes y que, además, sepan desempeñarse eficazmente en espacios educativos donde actúan personas de disímiles procedencias sociales y entornos culturales.
Por otro lado, la Conferencia Mundial de Educación Superior (CMES), realizada en Paris, en el 2009, refiere que:
Frente a la complejidad de los desafíos globales presentes y futuros, la educación superior tiene la responsabilidad social de mejorar nuestra comprensión de cuestiones que presenten múltiples aristas, involucrando dimensiones sociales, económicas, científicas y culturales, y nuestra habilidad para responder a ellas. Debiera asumir el liderazgo en su sociedad promoviendo la generación de conocimiento global con el objeto de enfrentar los desafíos mundiales, la seguridad alimenticia en todas las regiones, el cambio climático, la gestión de los recursos hídricos, el diálogo intercultural, la energía renovable y la salud de la población.
Las instituciones de educación superior, a través de sus funciones de docencia, investigación y extensión, desarrolladas en contextos de autonomía institucional y libertad académica, deberían incrementar su mirada interdisciplinaria y promover el pensamiento crítico y la ciudadanía activa, lo cual contribuye al logro del desarrollo sustentable, la paz, el bienestar y el desarrollo, y los derechos humanos, incluyendo la equidad de género.
Las instituciones de educación superior deberían buscar áreas de investigación y docencia que puedan hacer frente a cuestiones relacionadas con el bienestar de la población y establecer una base sólida para la ciencia y la tecnología pertinentes para el ámbito local.
Los sistemas de conocimiento autóctonos pueden expandir nuestro entendimiento de los desafíos emergentes; la educación superior debería crear asociaciones que reporten beneficios mutuos con las comunidades y las sociedades civiles para facilitar el intercambio y transmisión de conocimientos apropiados.
Estas dos declaraciones, CRES y CMES, refieren a la equidad, el acceso y la pertinencia de las IES, pero hacen énfasis en la educación intercultural.
Por su lado, la Declaración de Belo Horizonte, Brasil, ya refiere un enfoque particular en los procesos de Acreditación y Creación de Instituciones Interculturales de Educación Superior. Entre sus principales elementos sobresalen:
“ Se recomienda a las agencias gubernamentales con competencias en la materia revisar los criterios de evaluación y acreditación de IES y programas, así como los de asignación de fondos para investigación y proyectos especiales, para asegurar que éstos respondan a criterios de reconocimiento y valoración de la diversidad cultural y la interculturalidad con equidad. En este sentido, se sugiere que estos criterios deben responder a las peculiaridades de los diversos tipos y orientaciones de experiencias de ES, con especial atención a diferencias asociadas a particularidades lingüísticas, socioculturales, territoriales, y otras significativas según la diversidad cultural propia de cada país. En consecuencia, se sugiere generar y aplicar de manera integrada indicadores de calidad, pertinencia y relevancia. Los procesos de acreditación deben incluir criterios sociales y comunitarios orientados que expresen los intereses, propuestas y sensibilidades de pueblos y comunidades. Para esto es fundamental la construcción y desarrollo de indicadores que los visibilicen, así como el desarrollo de mecanismos interculturales de acreditación que hagan posible la participación de comunidades, organizaciones y pueblos involucrados en estos procesos. Las IES interculturales, indígenas y afrodescendientes han logrado avances significativos en la materia que constituyen referencias significativas para el diseño de políticas y programas de evaluación y acreditación.
Fomentar y facilitar el surgimiento y desarrollo de Instituciones Interculturales de Educación Superior. Para lograr esto es necesario trabajar proactivamente para superar los obstáculos institucionales que en algunos países se interponen a este objetivo.
Se recomienda asegurar que las políticas y programas e instituciones de educación superior fortalezcan los procesos endoculturales e identitarios como escenarios de diálogo intercultural.
Ya estas recomendaciones, mandatan la creación de sistemas que posibiliten a las IIIES, poder ser evaluada acorde a sus propios modelos y particularidades.
De ahí que las Universidades Indígenas Interculturales Comunitarias de Abya Yala en el marco del desarrollo de un modelo de educación superior propio de los pueblos y que sea acreditada su calidad, con el establecimiento de un sistema de evaluación y acreditación de las instituciones de educación superior miembros de la red, persigue los objetivos siguientes:
- Crear y promover el sistema de evaluación y acreditación de los centros del conocimiento mayor indígena, intercultural y comunitario continental y de sus modelos educativos.
- Asegurar el mejoramiento continuo de la calidad, pertinencia y relevancia académica en las Instituciones de Educación Superior miembros de la Red y otras vinculadas a la educación indígena, intercultural.
- Impulsar y fortalecer los procesos de la calidad en las instituciones de educación superior Indígenas interculturales y comunitarias, mediante acciones de evaluación de las universidades y sus programas o carreras.
- Definir los criterios, indicadores y estándares de calidad desde la perspectiva de la diversidad de instituciones de Educación Superior Indígenas Interculturales y Comunitarias de Abya Yala.
- Dar fe de la calidad de los procesos educativos desarrollados por las universidades y del significado de los diplomas y títulos otorgados.
El sistema, debe contemplar entre algunas particularidades, las siguientes a saber:
Demostrar flexibilidad en los procesos de evaluación y acreditación.
Tener pertinencia metodológica e instrumental que recoja las particularidades de las IIIES.
Crear capacidades del personal involucrado en la evaluación de procesos educativos en ambientes multiculturales.
Tener una cobertura continental que posibilite la cobertura de todas las IIIES.
Demostrar imparcialidad en los procesos de toma de decisiones para evaluar y acreditar las IIIES.
El sistema debe incluir algunos principios y criterios básicos y particulares para la evaluación de las IIIES. Entre estos sobresalen los siguientes a saber:
Principios:
AUTONOMIA
Es el principio fundamental que garantiza la independencia de las universidades o instituciones de condiciones similares, en relación con los poderes públicos, en la toma de decisiones en el ámbito de sus competencias.
Se entiende por autonomía, al proceso de mantener una estructura operativa que favorezca la gerencia de los procesos científico-culturales y administrativos de acuerdo a los sistemas locales y culturales de la población a la que se sirve.
También la autonomía es atribuida a la estructuración y gerencia institucional acorde a los propios sistemas y cultura organizacional de los modelos de universidades.
Por otro lado, la autonomía, debe ser entendida como los procesos de autodesarrollo de los pueblos en la búsqueda y aplicación del reconocimiento de sus derechos colectivos, hacia los cuales las instituciones de educación superior deben de apuntar.
CIENTIFICIDAD
Esta referido a la aplicación del rigor científico en los diversos enfoques, teorías métodos y procedimientos para el diseño y ejecución de los procesos de formación.
Entendida también como los mecanismos y procedimientos que se establecen de manera ordenada y sistémica para la creación y recreación de los conocimientos, saberes y prácticas de la humanidad.
DEMOCRACIA
La democracia como proceso que favorece la participación conciente y activa de la comunidad universitaria y los actores externos en la gestión de las funciones básicas institucionales: Docencia, Investigación-Innovación, Extensión Social Comunitaria, Internacionalización y gestión.
EQUIDAD
Está referida al sentido de justicia con que opera la institución en el contexto social. Mientras que en el contexto institucional, se refiere a los procesos de toma de decisiones políticas y normativa respecto a sistemas de admisión, evaluación, promoción, reconocimiento de mérito académico y en el contexto general, considera la no discriminación en todos los órdenes, el reconocimiento de las diferencias (de pensamiento, culturales, entre otras), y la aceptación de las diversas culturas en sus múltiples manifestaciones.
EQUIDAD DE GÉNERO
Implica la participación de mujeres y hombres en cuanto al acceso de la justicia en términos igualitarios al uso control y beneficios de los bienes servicios, recursos y oportunidades de la sociedad, así como en la toma de decisiones en todos los ámbitos de la vida social.
La equidad de género considera las diferentes oportunidades que tienen los hombres y las mujeres, las interrelaciones existentes entre ellos y los distintos papeles que socialmente se les asignan.
HONESTIDAD
Es la capacidad y cualidad humana e institucional que consiste en desarrollar acciones con coherencia y sinceridad, apegados a los valores de verdad y justicia.
Se entiende también como la rectitud que muestran las instituciones en el cumplimiento de la misión y fines establecidos. Implica el respeto por los valores y referentes éticos universales que inspiran el servicio educativo.
INTERCULTURALIDAD
Es un proceso de relación, negociación e intercambio cultural, que conduce al desarrollo de una interacción entre personas y colectividades, conocimientos, saberes y prácticas culturalmente diferentes, fomentando la igualdad como un elemento de identidad y oportunidades para el desarrollo.
Por otro lado, la interculturalidad considera la diversidad étnica, lingüística, cultural, técnica, científica y humanista, al reconocer los diferentes sistemas educativos y enfoques que se implementan en la creación y recreación de conocimientos, saberes y prácticas de los pueblos.
La interculturalidad incorpora el diálogo de saberes y el reconocimiento de la diversidad de valores y modos de aprendizaje como elementos centrales de las políticas, planes y programas educativos.
JUSTICIA
Entendida como el conjunto de reglas y normas que establecen un marco adecuado para las relaciones entre personas e instituciones, autorizando, prohibiendo y permitiendo acciones específicas en la interacción de individuos e instituciones. El conjunto de reglas tiene un fundamento cultural y en la mayoría de sociedades modernas un fundamento formal.
LIBERTAD
Comprende la condición y posibilidad que tienen las personas, e instituciones de tomar las decisiones sobre su futuro.
• NACIONALISMO
Reconocimiento, promoción y defensa de la soberanía territorial, la identidad, los valores, las artes, las culturas que conviven en un espacio geográfico.
PAZ
Proceso que implica un estado de armonía en la relación entre las personas, las instituciones, la sociedad y el medio ambiente para impulsar el desarrollo de los pueblos.
RENDICION SOCIAL DE CUENTAS
Comprende la acción de proveer información pública, confiable, transparente y oportuna de su estructura, quehacer y resultados.
RESPETO
Es el principio que marca el establecimiento de una actitud positiva en el desarrollo de un sistema de relaciones intra e interinstitucionales reconociendo e el valor que tienen las personas y las instituciones en el logro de los objetivos comunes.
Implica el respeto a la vida, a los saberes locales, a los derechos humanos fundamentales.
RESPONSABILIDAD-CORRESPONSABILIDAD
Cumplimiento de la obligación contraída ante la sociedad de garantizar la calidad de los procesos educativos.
Compromiso de los actores sociales, políticos y económicos involucrados en el desarrollo del subsistema de la educación superior con calidad, pertinencia y equidad.
SOLIDARIDAD
Entendida como el desarrollo de acciones de respaldo, protección y defensa de los derechos individuales y colectivos de los actores sociales, de tal forma que favorezcan el desarrollo de las culturas y los pueblos.
TOLERANCIA
Implica la capacidad de respeto a las ideas, sistemas de creencias o prácticas de los demás cuando son diferentes o contrarias a las propias.
TRANSPARENCIA
Referida a la rendición de cuentas (financiera y social) sobre las acciones desarrolladas en el desempeño del cargo y sus atribuciones.
Garantiza que los resultados del Sistema sean confiables y se expresen con claridad y accesibilidad.
Deber de las autoridades de realizar sus acciones de manera pública, como un mecanismo de control del poder y de legitimidad democrática de las instituciones públicas. Implica actitudes de honestidad en la gestión y manejo de recursos institucionales.
Criterios
Pertinencia: Es la correspondencia entre los objetivos de las carreras de la Universidad y los requerimientos de la sociedad. Implica una respuesta crítica y proactiva de las carreras a las necesidades sociales, económicas, políticas y culturales del área geográfica de influencia, transformando el entorno en que opera y el marco de valores en que se inspira la institución.
Impacto: Se refiere a la influencia interna y externa que poseen las carreras. A nivel interno considera los cambios que experimentan y promueven los / as estudiantes que participan en las carreras y a nivel externo se traduce en los aportes y transformaciones que hacen los / as graduados en su contexto.
Coherencia: Es el grado de correspondencia e integración entre los currículos de las carreras la misión institucional, la estructura organizativa, procesos, medios que se disponen y el modelo pedagógico de la universidad.
Universalidad: Se refiere a la dimensión intrínseca del desarrollo de las carreras, esto es, el conocimiento humano que a través de los campos de acción le sirven como base de su identidad. También hace referencia a la multiplicidad y extensión de los ámbitos en que se ejecutan las carreras, así como el ámbito geográfico y social en que ejerce su influencia.
Eficacia: Es la correspondencia entre los logros obtenidos y los propósitos preestablecidos en las carreras.
Eficiencia: Es la capacidad para adecuar y utilizar en forma óptima los recursos disponibles de tipo humano, material y financiero, así como los medios pedagógicos y de administración curricular, en función del cumplimiento de los propósitos de las carreras.
Equidad: Está referida al sentido de justicia con que operan las carreras en el contexto institucional y en el contexto general. En el contexto institucional, se refiere a los procesos de toma de decisiones, políticas y normativas respecto a sistemas de admisión, evaluación, promoción, reconocimiento de méritos académicos; y en el contexto general, considera la no discriminación en todos los órdenes, el reconocimiento de las diferencias (de pensamiento, culturales, entre otras), y la aceptación de las diversas culturas en sus múltiples manifestaciones.
Transparencia: Se refiere a la capacidad para explicitar abiertamente sus condiciones internas de operación y los resultados de ésta.
Interculturalidad: Es un proceso de relación, negociación e intercambio cultural, que conduce al desarrollo de una interacción entre personas y colectividades, conocimientos y prácticas culturalmente diferentes.
Género: Es la construcción y/o reafirmación de nuevos roles que permitan las relaciones dialógicas entre hombres y mujeres dentro de un marco de equidad y de respeto al ejercicio de los derechos individuales y colectivos.
Cobertura:
Indicadores del Sistema
A continuación se presentan una serie de indicadores orientados a valorar la calidad de las instituciones de educación superior orientados a la diversidad cultural. Éstos, se describen a través de cuestionamientos que las instituciones podrían contestar dependiendo de los mecanismos y procedimientos que se desarrollen para el efecto.
Las preguntas que se presentan no agotan todos los posibles aspectos a evaluar, pero muestran un punto de partida para la reflexión y la autoevaluación institucional.
La propuesta de indicadores que se presentan, tienen una connotación de interrogantes que nos permiten ir haciendo las valoraciones pertinentes a cada uno de los procesos que desarrollan las IIIES.
Entre algunos de los indicadores encontramos:
1. Gestión:NormasyPolíticasInstitucionalesquePermitenlaAtención de la diversidad Étnica y Cultural.
¿Se encuentran las políticas, leyes, reglamentos y demás documentos normativos institucionales orientados adecuadamente a la atención de la diversidad étnica y cultural?
1.1 ¿De qué forma participan los líderes, maestros y sabios de las comunidades indígenas y afrodescendientes en la conformación de políticas, leyes, reglamentos y demás documentos normativos de la institución?
1.2 ¿En qué medida se ayuda a los estudiantes indígenas y afrodescendientes con becas y apoyos para que estos ingresen, permanezcan y culminen sus estudios en la institución?
1.3 ¿Qué porcentaje del personal administrativo es de origen indígena y/o afrodescendiente?
1.4 ¿En qué medida existe equidad de género en la institución?
1.5 ¿Aplica la institución procedimientos de evaluación de la calidad
desde la perspectiva de la atención para la diversidad cultural?
1.6 ¿En qué medida contribuye la institución a objetivos locales, regionales o nacionales de calidad de vida, desarrollo humano y económico sustentable, ciudadanía, democracia, u otros correspondientes a las comunidades indígenas y/o
afrodescendientes?
1.7 ¿Qué porcentaje de administradores y funcionarios de la
institución son indígenas y/o afrodescendientes?
2. AutoevaluaciónEscolaryAcadémica
2.1 ¿Qué porcentaje de estudiantes se adscriben como procedentes de las comunidades originarias y afrodescendientes del total de la institución?
2.2 El sistema de registro y estadística de la institución, incluye indicadores
culturalmente pertinentes que reflejen las particularidades de los pueblos?
2.3 ¿Qué porcentaje de la matrícula proviene de otras regiones disímiles a las que la institución atiende?
2.4¿Cómo los procesos investigativos, de emprendeduría y de acompañamiento al fortalecimiento del tejido vivo, reflejan la diversidad étnica cultural de los pueblos?
2.5 ¿Cómo se da la aplicación de las pedagogías propias de los pueblos en los procesos de creación, recreación de los conocimientos, saberes y prácticas con matrices culturales diferentes?
2.6 ¿En qué medida se ha avanzado en la matrícula de estudiantes indígenas y afrodescendientes en la institución?
2.7 ¿Cuáles son las políticas de equidad de género, clase y etnia en la institución? ¿Cómo se evalúa la práctica de estas políticas?
2.8 ¿En qué y en dónde están trabajando los egresados?
2.9 ¿Corresponden estos lugares de trabajo con lo que se planeó al crear la institución o programa?
2.10 ¿En qué medida los egresados han influido en el bienestar de sus comunidades?
2.11 ¿Qué porcentaje de los egresados regresan o han regresado a sus comunidades?
2.12 ¿Qué porcentaje de los egresados han sido absorbidos en ambientes ajenos a sus comunidades?
2.13 ¿Qué porcentaje de los egresados han sido rechazados por el mercado laboral?
2.14 ¿En qué lenguas o dialectos vernáculos se desarrollan los procesos de enseñanza-aprendizaje y cuántas lenguas se utilizan para ello?
3. Pertinencia de los Programas y Servicios Académicos para la Atención de la Diversidad Étnica y Cultural.
3.1 ¿En qué medida ha asegurado la institución el acceso de estudiantes indígenas y afrodescendientes a la educación superior?
3.2 ¿Cómo se integran elementos de la diversidad cultural en los programas educativos?
3.3 ¿Cómo los programas académicos responden a la diversidad cultural de los pueblos?
3.2 ¿Qué estrategias utiliza la institución para asegurar el avance de los estudiantes hasta su graduación?
3.3 ¿En qué medida los programas educativos son pertinentes en cuanto a la atención de la diversidad étnica y cultural?
3.4 ¿Qué porcentaje de los profesores son de origen indígena y afrodescendiente?
3.5 ¿Cuentan los centros de documentación, bibliotecas, archivos o semejantes con material en las diferentes lenguas de los estudiantes que atiende la institución?
3.6 ¿A cuánto asciende el acervo de libros y revistas escritas en los idiomas indígenas y afrodescendientes?
3.7.¿En qué medida estos materiales bibliográficos son pertinentes para la atención de los estudiantes indígenas y afrodescendientes?
3.8 ¿Existe investigación orientada a mejorar las condiciones de las comunidades indígenas y afrodescendientes que atiende la institución?
3.9 ¿Cuál es la cantidad de producción cultural: libros, artículos y otras obras orientadas desde y para la diversidad étnica y cultural?
3.10 ¿Cuántos profesores indígenas y afrodescendientes tienen un posgrado, maestría y doctorado académico?
3 Programas Educativos con Perspectiva Intercultural
3.8¿En qué medida participan los líderes y sabios indígenas y afrodescendientes en los programas educativos de la institución?
3.9¿En qué medida se incorporan los saberes y conocimientos de las comunidades indígenas y/o en los programas educativos?
3.10 ¿Cuál es el nivel de pertinencia de los programas educativos en relación con la situación de las comunidades indígenas y afrodescendientes que la institución atiende?
3.11 ¿Qué papel juega la lengua y la cultura indígena y afrodescendiente en la conformación de los programas educativos?
3.12 ¿cuáles son las lenguas indígenas que se usan cotidianamente en la institución y en los procesos de enseñanza?
3.13 ¿Son las características de las modalidades/procesos de enseñanza/aprendizaje puestos en práctica (aula, campo, investigación, prácticas, etc.), adecuados para la atención de la diversidad étnica y cultural?
4 Procesos de Innovación Educativa Intercultural
4.8¿En qué medida el Curriculum de la institución obedece a la innovación y creatividad educativa para privilegiar la etnoeducación y las pedagogías acordes a la atención de la diversidad cultural?
4.9¿En qué medida la innovación y la creatividad educativa favorece la práctica de interculturalidad en la institución?
4.10 ¿Cómo las y los egresados y graduados de la universidad interactúan en contextos de diversidad cultural?
5 La Cooperación Académica Nacional e internacionalización con enfoque Intercultural.
5.8¿Cuántos y cuáles convenios ha realizado la institución con otras universidades, instituciones nacionales e internacionales que atienden la diversidad cultural en la educación superior?
5.9¿Qué mecanismos de apoyo se han generado para mejorar las condiciones de intercambio académico para estudiantes y profesores indígenas y afrodescendientes en instituciones nacionales e internacionales?
5.10 ¿Cuántos estudiantes indígenas y afrodescendientes han sido beneficiados por esos convenios de cooperación académica nacional e internacional?
6 Gestión del Desarrollo del Acompañamiento a los Pueblos, Organizaciones e Instituciones con Enfoque Intercultural.
6.8¿Cuántos y cuáles programas ha desarrollado la institución en el acompañamiento a los Pueblos indígenas y/o afrodescendientes?
6.9¿Cuál ha sido el impacto de los proyectos de la institución en las comunidades indígenas y afrodescendientes?
6.10 ¿De qué forma participan los líderes de las comunidades indígenas y afrodescendientes en el diseño, la planeación, la ejecución y el control de los proyectos institucionales?
7 De análisis de la formación del estudiante.
7.8¿En qué medida se consideran los saberes de las comunidades originarias en la formación del estudiante indígena y afrodescendiente?
7.9¿De qué manera los métodos pedagógicos son innovadores y permiten la formación de los estudiantes indígenas y afrodescendientes?
7.10 ¿Cuáles son los fines en la formación de los estudiantes indígenas y afrodescendientes?
7.11 ¿Cómo se relacionan los conocimientos endógenos de los estudiantes para el desarrollo de la ciencia y la tecnología en esta institución?